jueves, 7 de julio de 2011

Saber o no saber, esa es la cuestión

Cerrado, así tengo el pecho, o no, es la garganta, no puedo identificarlo, será porque no está ahí, será porque está solo en mi cabeza, y esos ojitos entrecerrados me encantan, pero el pecho cerrado no, o la garganta. Hace unos días Alex me dijo que él había descubierto que esa sensación era angustia, él había pensado que estaba por tener un ataque y cuando descubrió con su psicóloga que era angustia, se le pasó, a mi no se me pasa, igual si lo pienso me parece que son muchos sentimientos encontrados, los sentimientos no deberían encontrarse, son eso, son sentimientos, que locura eso del encuentro, si ni siquiera se conocen, son sentimientos, pero igual se encuentran y se chocan y se pelean como si hubiera lugar para uno solo, eso es lo que debe estar pasando, se están peleando por su lugar, igual no me gustaría renunciar a ninguno, son míos y salvo esos que me provocan rabia y son pocos, al resto los quiero a todos, y cuando lo pienso me doy cuenta que los quiero conmigo y ese es otro sentimiento. No voy a ir al médico, ni siquiera voy a suspender el turno, al final se aprovechan, uno va, explica lo que le pasa, ellos no saben nada pero igual te recetan algo, ah, y por supuesto hay que volver a ir, porque tienen que facturar algún manguito más por otra consulta, cada vez me gustan menos, no sé ni para que mierda saque el turno, pero claro, el miedo está, y que es lo que me pasa solo Dios lo sabe, aunque en realidad solo lo debo saber yo, lo que pasa es que no sé donde lo sé, pero seguro que lo sé, como lo va a saber Dios, si ni siquiera sé quién es, como voy a pensar que Él sabe que me pasa si ni siquiera sé si existe, si, si, se la pasaron diciéndome que existe, pero es igual que con los médicos, tenemos que creer todo lo que nos dicen. Me siento mejor, debe ser que tanto darle vueltas alguno de esos sentimientos se fueron yendo, ¿A dónde carajo van los sentimientos?, que se yo, ¿hace falta preguntarse tantas cosas o es mejor no preguntarse nada y prender la tele?, cuando veo algunos que se hipnotizan, los miro y no parece que tuvieran cerrado el pecho, o la garganta, mejor me voy a dormir, mañana seguro que me despierto con las ideas más ordenadas, ¿por qué será?, ¿será por soñar?, ¡basta!, no empieces con lo de los sueños que me quiero dormir, mejor prendo la tele.

1 comentario:

  1. Me encantó! Este es mi texto elegido =)
    Felicitaciones por la inauguración bloggera y un beso grandote.

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